Estado de Brasil: Pernambuco - Alagoas
Tiempo pedaleado: 04:50:26
Kilómetros recorridos: 68.09
Tiempo total pedaleado: 289:47
Kilómetros total recorridos: 3011.53
Me levanté temprano y decidí que ya que tenía pagado tanto por la posada valia la pena aprovechar un poco del lugar. Sali a dar un paseo por la playa y darme un chapuzón. Tomé un par de fotos y luego de un copioso desayuno puse pies en polvorosa.
Segui por la playa un buen trecho, luego cogi carretera y seguí mi camino hacia la división entre Pernambuco y Alagoas.
Justo después de cruzar la frontera entre los dos estados, poco antes de Maragogi iba pedaleando tranquilamente cuando una Land Rover se para al lado mio. El conductor, me empezó a hablar, al principio no le entendía, me decía que me invitaba un agua de coco, yo pues dije que si (la verdad tenía sed y calor), el señor siguió en su camioneta y pues bueno, yo creí que había entendido mal, así que seguí mi camino como si nada. Más adelante el mismo señor me estaba esperando, ahí se bajó del carro hablamos un poco y me dijo que su casa quedaba más adelante, y que quería presentarme a un amigo suyo que también era cicloturista, yo dije que bueno, y seguí en la bicicleta a mi ritmo, luego de un par de metros se vió que a mi ritmo la cosa se iba a demorar así que en un arranque de incosiendia de mi parte decidí amarrar mi bicicleta a la parte e atrás de la camioneta del señor. Todo fue bien durante los siguientes 15 minutos en dónde mateniendo el equilibrio y cordinando por el retrovisor la velocidad adecuada.
El problema fué cuando el señor me hizo la señal para girar a la izquierda, yo la interpreté tarde y pues la fuerza del carro me ganó, la bicicleta agarró por un lado y mi inercia llevó mi cuerpo hacia a otro. En menos de un segundo estaba rodando por el suelo, mis cosas regadas por la carretera y Ludmilla siendo arrastrada algunos metros.
Afortunadamente no paso nada, solo un raspon en la rodilla, un para de magulladuras en Ludmilla y bueno, además del agua de Coco me gané el almuerzo :P.
Hablamos un montón de tiempo con Luis, así se llamaba el señor. Me mostró sus bicicletas reclinables, por pocó hacemo un cambio, y bueno, ya bien alimentado (pero un poco costipado) seguí mi camino hacia el sur para llegar a Porto de Pedras.
El resto del día no tuvo mayores novedades. Al finalizar la tarde di una vuelta por Porto de Pedras y como soy buen amigo y sabía que Himura estaba de cumpleaños, pues me comí una langosta en su honor. ¿Será que la saboreo igual que yo?